Dios mío, tú me das el aliento diario que necesito

Un letrero para reconocer que es Dios quien nos da diariamente el aliento que necesitamos:

2 comentarios

  1. Sólo tu preciosa sangre, Cristo Salvador,
    El pecado quitar puede de este pecador.

    ¡Oh! con tu preciosa sangre
    Límpiame, Señor;
    Aun por mi la derramaste,
    En tu gran amor.

    Y si mi pecado fuere como el carmesí,
    Puro mas que blanca nieve, me pondrás a mi.

    Sólo tu preciosa sangre salvación me da;
    Haz que sin cesar me guarde libre de pecar.

    Por la sangre del cordero soy el vencedor,
    De Satán y del pecado – ¡gloria al Salvador!

    Gloria a Dios, que nos mira con amor eterno.

Responder a Pablo E. Castillo Cancelar respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.